El Instituto Superior Intercultural Ayuuk (ISIA), es un proyecto que se fundó en el 2006, en plena revuelta Oaxaqueña, concebido para llevar educación de calidad y pertinencia a la región ayuuk de la zona baja, para fortalecer y hacer justicia histórica a los pueblos mixes que por décadas han luchado e impulsado procesos educativos propios. El proyecto educativo esta ubicado en la comunidad de Jaltepec de Candayoc, en el municipio de San Juan Cotzocon, ha atendido a más de 600 estudiantes, de distintas pueblos originarios de oaxaca: ayuuk, binni záa, ikoots, chinanteco, zoque, mixteco, choo´l y de otros estados como Sur de Veracruz, Tabasco, Chiapas, Puebla, Jalisco, Nayarit, Chihuahua. Logro que resulta esperanzador, pues las oportunidades de acceso a educación superior propias en el país son pocas, desenredar el conocimiento en comunidad y desde la comunalidad es el corazón del ISIA. Desde sus inicios el ISIA fue el primer proyecto de universidad privada indígena en el país, que se ha gestado con el apoyo fundamental de Servicios del Pueblo Mixe y el Sistema Universitario Jesuita.
El ISIA ha colocado en el centro del ejercicio al derecho a la educación y se ha construido una educación propia, que se piensa y se teje desde el territorio que se habita, en el cuidado de la salud, en la defensa de la vida y el territorio, porque a partir de ahí se puede conocer e identificar necesidades, problemáticas que atraviesan las comunidades de las que son originarios nuestros estudiantes, la apuesta principal del proceso formativo es que los egresados y egresadas retornen a fortalecer los procesos organizativos, productivos, y educativos de sus comunidades o región.
En el marco de la celebración del aniversario del instituto se llevó a cabo la ceremonia protocolaria del cambio de kutunk, el maestro Edilberto Cardoso Vásquez, ayuuk ja´ay de Santa María Tlahuitoltepec, recibió el bastón de mando, de manos del Dr. Francisco Morfín Otero, director saliente, el pasado 11 de noviembre. Kutunk, en mixe, nada tiene que ver con el significado occidental de la palabra autoridad, significa literalmente “cabeza de trabajo”, “jefe de trabajo”; en la práctica es quien con su ejemplo motiva que la comunidad realice las actividades necesarias para su propio desarrollo, nos recuerda Floriberto Díaz, en sus escritos sobre comunalidad.
Este momento se hace histórico, en su discurso como kutunk entrante el maestro Cardoso señaló: “la entrega de bastón de mando no es un evento o un espectáculo, cuando se nombra el ser cabeza de trabajo, cabeza de la institución, lo primero que se piensa es trabajo, es creatividad, es asumir responsabilidad, es pensar con quien o quienes queremos trabajar, es pensar para que queremos una universidad, para quienes queremos una universidad, en dónde va a trabajar la universidad y con quienes se va a acompañar”.
Mencionó ademas que el ISIA ha sido referente para otros proyectos educativos que se construyen desde lo propio, “el trabajo es el que nos va a enseñar hacia donde vamos construyendo nuestros proyectos y el ISIA es ese espacio para irnos descubriendo a todas y todos, entre todas y todos haciendo juntos, haciendo cosas. La universidad es para experimentar, crear, entrenar y sembrar la creatividad en nuestros pensamientos y corazones y de esa manera poder encontrar luces, poder desenredarnos a nosotros mismos, en nuestras comunidades en otras comunidades, en otras regiones, en otras territorialidades, en esas territorialidades que están viendo en el ISIA como un modelo, como un proyecto a seguir y que también quieren construir procesos de educación propios, eso nos ha enseñado estos 17 años”, finalmente agrega que asumir el compromiso de estar en la cabeza de trabajo representa favorecer el hacer entre todos y todas la universidad.
El compromiso del ISIA con la educación de jóvenes en Oaxaca ha sido fundamental. La articulación y vinculación con actores de la sociedad civil, con organizaciones sociales, centros de derechos humanos, instituciones educativas y la propia comunidad de Jaltepec de Candayoc junto con sus autoridades comunitaria y asamblea han fortalecido la lucha por una educación propia, donde la lengua, identidad, cultura, el tequio, la asamblea son el centro de la vida universitaria.
Y por ello, celebramos y continuamos haciendo comunidad, desde la universidad, a partir de los principios del wëjen kajën.